Tipos de relación entre la mujer y el hombre:

Los tipos de relación entre la mujer y el hombre son los siguientes:

  1. La esposa:

Le es lícito al hombre mirar y disfrutar de su esposa como desee, y lo mismo puede hacer su esposa con él; Allah describe al marido como la vestimenta de la esposa y a la esposa como vestimenta del marido, como una imagen muy bella de la relación sentimental y física que existe entre ellos. Allah, glorificado sea, dijo: “Ellas son la vestimenta de ustedes y ustedes la suya” (Corán 2:187; ver página 213).

  1. Parientes mujeres (maharim):

Las parientes mujeres son todas aquellas con las que el hombre tiene prohibido, de forma permanente, contraer matrimonio. Esas mujeres son:

1 La madre biológica, las abuelas paterna y materna, y sus ancestros (es decir, sus bisabuelas, tatarabuelas, etc.).
2 La hija biológica y la nieta, tanto por parte del hijo como de la hija, y sus descendientes.
3 La hermana, la media hermana por parte del padre y por parte de la madre.
4 La tía paterna directa, que es la hermana del padre, o la media hermana del padre ya sea por parte de su madre o por parte de su padre, así como las tías paternas de sus padres.
5 La tía materna directa, que es la hermana de la madre, como también la media hermana de la madre ya sea por parte de su madre o por parte de su padre, así como las tías maternas de sus padres.
6 La sobrina, tanto la hija del hermano por parte del padre como la hija del hermano por parte de la madre, y sus descendientes, como la nieta del hermano.
7 La hija de la hermana por parte del padre o por parte de la madre, y sus descendientes, como la nieta de la hermana.
8 La suegra, independientemente de si sigue casado con su hija o no, así como la abuela materna de la esposa.
9 La hijastra.
10 La esposa del hijo, y demás descendencia, como la esposa del nieto
11 La esposa del padre, y demás ascendiente, como la esposa del abuelo
12 La nodriza o madre por lactancia, que es la mujer que lo amamantó en los primeros dos años un mínimo de cinco veces hasta saciarse.
13 La hermana de leche, que es la hija de la nodriza anteriormente mencionada; se consideran iguales los lazos familiares por consanguineidad y el lazo por lactancia. Así, los parientes mujeres por sangre también son las mismas por lactancia.
  1. Mujeres ajenas (no parientes):

La mujer extraña es toda mujer con la que no hay ninguno de los lazos de parentesco antes mencionados, ya sea perteneciente a la familia, como las primas y las cuñadas, o las mujeres ajenas a la familia en general.

Por no cumplir las enseñanzas del Islam, observamos con tristeza que a diario ocurren crímenes sexuales y relaciones adúlteras que deshonran a las personas, rompen familias y destruyen a la sociedad.

El Islam ha dispuesto una serie de modales necesarios que rigen la relación entre el hombre y la mujer que son extraños entre sí, para proteger su honor y alejarlos de las tentaciones ilícitas. Allah, que es el Creador del ser humano y sabe qué lo beneficia, dijo: “¿Acaso no lo va a saber Quien todo lo creó? Él es Sutil, y está bien informado de cuanto ustedes hacen” (Corán 67:14).

Modales necesarios en la relación entre el hombre y la mujer que son extraños entre Sí:

  1. Recatar la mirada:

El musulmán tiene que evitar mirar las partes pudendas (awra) de los demás y lo que le lleve a la excitación sexual, y debe evitar mirar detenidamente a una mujer a menos que tenga derecho.

Allah ordenó a hombres y mujeres recatar las miradas porque es lo mejor para guardar su castidad y su honor, ya que observar sin límites puede llevar al pecado; dijo Allah, el Altísimo: “Diles a los creyentes [¡oh, Muhámmad!] que recaten sus miradas y se abstengan de cometer obscenidades [fornicación y adulterio], pues esto es más puro para ellos. Ciertamente Allah está bien informado de lo que hacen. Y diles a las creyentes que recaten sus miradas, se abstengan de cometer obscenidades” (Corán 24:30-31).

Si el musulmán ve lo que es ilícito por accidente, debe recatar su mirada y no permanecer mirando; el recato de la mirada incluye las revistas, la internet, la vía pública y todo aquello que contenga imágenes provocativas.

  1. Tratar con cortesía y buenos modales:

El hombre y la mujer extraños entre sí pueden tratarse y hablar con cortesía y buenos modales, lejos de cualquier actitud provocativa, pero

  • Allah prohíbe a las mujeres hablar de manera seductora con los hombres, y les ordena hablar con firmeza. Él dijo: “No habléis con voz seductora, de modo que quienes tengan sus corazones enfermos sientan alguna atracción. Hablen pues recatadamente” (Corán 33:32).
  • También prohíbe moverse de manera provocativa, por ejemplo al caminar, mostrando sus encantos y adornos; dijo Allah, el Altísimo: “…que no muestren de sus adornos más de lo que está a simple vista [como lo que usan sobre el rostro, las manos y las vestimentas]” (Corán 24:31).
  1. La prohibición de quedarse a solas:

El Islam prohíbe al hombre y a la mujer extraños quedarse juntos a solas donde nadie los pueda ver; la prohibición tiene el fin de evitar caer en la tentación y el pecado; dijo el Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él): “Cuando un hombre y una mujer (extraños) están a solas, el demonio es el tercero entre ellos” (At-Tirmidhí 2165).

  1. El velo islámico (hiyab):

Allah, el Sapientísimo, ordenó a la mujer creyente vestirse con el velo islámico porque en ella puso belleza y encanto, razón que la convierte en una tentación atractiva para el hombre, más de lo que el hombre sería para ella.

El Islam legisla el velo islámico por las siguientes razones:

  • Para ayudar a la mujer a cumplir con su cometido en la sociedad y en los diferentes ámbitos del conocimiento y del trabajo, sin ser juzgada únicamente por su belleza física, y así protegerla del acoso y preservar su dignidad y su castidad.
  • Minimizar y mitigar las posibilidades de acoso sexual y tentación, asegurando así la salud emocional de la sociedad y protegiendo la dignidad de la mujer.
  • Ayudar a los hombres que tratan con mujeres y las miran, a ser caballeros castos y respetuosos; así, tratarán a la mujer como un ser humano igual a ellos, atribuyéndole todas sus capacidades intelectuales y responsabilidades, y no considerándolas un objeto sexual, de burlas o de diversión.

Características del Velo Islámico (hiyab):

Allah ordenó a la mujer cubrir todo su cuerpo excepto la cara y las manos delante de hombres extraños. Dijo Allah, el Altísimo: “…que no muestren de sus adornos más de lo que está a simple vista” (Corán: 24:31). Lo que está a simple vista son la cara y las manos, a menos que la cara o las manos sean extremadamente atractivas, entonces se deben cubrir también.

Requisitos del velo islámico (hiyab) correcto:

La mujer puede vestir ropa del estilo y colores que desee, siempre que cumpla estos requisitos:

  1. Que la ropa oculte todas las partes pudendas (awra).
  2. Que sea cómoda, suelta, no estrecha y apretada al cuerpo, permitiendo visualizar las partes del cuerpo.
  3. Que no sea translúcida ni permita ver partes del cuerpo a través de ella.